
COLEGIO MONTESSORI
DE LAS AMÉRICAS
Nuestros Valores
Como profesionales e interesados, en el desarrollo integral de los niños; no olvidamos la responsabilidad que tenemos como actores de nuestro presente y sus consecuencias.
Recordemos que, en México, el bajo rendimiento escolar se ha convertido en un problema social, por la cantidad de reprobados por año y los porcentajes de deserción escolar (OCDE 2012, 2013). Muchos chicos, dejan el sistema con conocimientos mÃnimos de lectura y cálculo (UNESCO 2013-2014). Por lo anterior es que nos esforzámos al máximo, desde cada una de las áreas que nuestra comunidad nos ha confiado.

Guarderia y JardÃn de niños
La profesora observa a cada niño, en sus necesidades, capacidades e intereses y le ofrece oportunidades de trabajo inteligente, con un propósito concreto al servicio del cuidado de sà mismo y de la pequeña comunidad que es el aula.
La profesora le permite actuar, querer y pensar por sà mismo, ayudándolo a desarrollar confianza y disciplina interior, sin repartir premios ni castigos, la satisfacción es interna y surge del trabajo personal de los niños.
Cuando los niños, según su desarrollo evolutivo, están listos para una lección, la profesora introduce el uso de nuevos materiales y presenta actividades de forma individual o a grupos reducidos.
El ambiente Montessori es un lugar donde los niños, trabajan en grupos o individualmente, respetando, de este modo, su propio estilo y ritmo.
El ambiente promueve la independencia del niño en la exploración y el proceso de aprendizaje.
La libertad y la autodisciplina hacen posible que cada niño encuentre actividades que dan respuesta a sus necesidades evolutivas.
La doctora Lillard, profesora de PsicologÃa de la Universidad de Virginia, describió el aula Montessori como un "ecléctico laboratorio de investigación universitario en miniatura" (Montessori. The Science Behind the Genius, 2005), donde los niños realizan sus propios proyectos tal como lo hacen los investigadores en sus laboratorios.
Centro Psicopedagógico
“La educación cumple una función esencial en el desarrollo de los individuos y de las sociedades. No es un remedio milagroso ni una forma mágica, que nos abra las puertas de un mundo en el que vayan a realizarse todos los ideales, pero es uno de los principales medios, disponibles para propiciar una forma más profunda y armoniosa de desarrollo humano y reducir asà la pobreza, la exclusión, la ignorancia, la opresión y la guerra (UNESCO 1996).
Sólo los ciudadanos y las ciudadanas que han recibido una educación pueden lograr el crecimiento económico, y para ello es necesario, ahora más que nunca, hacer posible la igualdad de acceso a una educación de calidad. Ningún paÃs ni sociedad puede permitirse el lujo de excluir a nadie de la educación
Las escuelas son establecimientos culturales donde los niños y las niñas aprenden los idiomas, la historia y la cultura de sus respectivas sociedades, adquieren competencias sociales y confianza en sà mismos, amplÃan sus horizontes y abordan las problemáticas como ciudadanos activos y de pleno derecho. Las personas a las que se les niega este amplio contexto educativo, tienen menos probabilidades de participar activamente en la sociedad y de influir en las decisiones que afectan a sus vidas y a las de los demás.
El acceso a la educación básica no se puede separar de la provisión equitativa de una educación de calidad. El aprendizaje de calidad, requiere de estudiantes entusiastas y motivados; docentes bien capacitados que utilicen métodos pedagógicos activos para apoyar el aprendizaje personalizado; instalaciones y materiales de enseñanza adecuados conocimientos y capacidades, claramente definidos en el currÃculo, efectivamente enseñados y evaluados con precisión; y un entorno de aprendizaje sano, seguro y sensible a las cuestiones de género que haga un uso completo de las capacidades de los niños en la lengua local (UNESCO 2000, 2004-2008)".